Álbum fotográfico
Mari Carmen Miquel Cortina,
Jesús Antonio Raga Perales
"Una vida vinculada al mundo teatral"
Jesús Raga, comenzó en el teatro en 1961,
con un pequeño papel en la zarzuela "Los claveles"
del Maestro Serrano, obra que se puso en escena
el 25 de Noviembre en el Centro Cultural Ruzafa,
un pequeño y acogedor teatro situado en la calle de Sueca.
A partir de ese momento se suceden, una tras otras,
sus intervenciones en el escenario, cada vez con
papeles más importantes. En la foto interpreta a
un profesor de música y baile que le daba clases
a Rafael Marco, que su mayor sueño era el de
convertirse en "una gran" cupletista.
En la década de los 60 se programaban una velada
teatral cada mes, con dos o tres obras de teatro en
la misma noche, que hacían las delicias de un
publico que agradecía el trabajo de las actrices
y actores con cariñosos aplausos.
Jesús participo en muchos de aquellos estrenos
representando a distintos personajes.
Estreno tras estreno sus personajes eran más relevantes
y los diálogos mucho más largos lo que acarreaba más
estudio y responsabilidad en la interpretación de los mismos.
Como curiosidad comentar que todavía faltaban
varios años hasta la aparición de las maquinas
fotocopiadoras, por lo que el papel de cada actriz
y actor debías copiarlo a mano, ya que tan solo
existía una copia del libreto original y este tan
solo lo tenía el director para corregir en los ensayos.
Te dejaban el libreto y tenías que copiar tu papel
lo antes posible y devolverlo rápido ya que había otro
actor esperándolo para poder copiar el suyo.
Por supuesto, apenas leías la obra completa,
en primer lugar ojeabas el papel que el director
te había asignado, en segundo lugar comenzabas
a copiarlo en una libreta, incluyendo la última
frase del actor o actriz con la que hablabas en la
obra, frase que estabas esperando pues marcaba
el momento de tu intervención, y si tu interlocutor,
se la "comía" o la "cambiaba" por otra parecida
estabas más perdido que "Carracuca"...
El teatro siempre ha tenido una "maldición" que te
persigue en cada estreno, y es que si el actor o actriz
que te esta dando "la replica" no dice , o no termina
la frase correctamente, te deja a la deriva totalmente,
mientras el publico lo que percibe es la sensación que
"tú" te has perdido y que "no te sabes el papel"...
Son muchas las anécdotas que nos ha ocurrido
tanto, a Mari Carmen como a mi, durante los
estrenos de las obras teatrales. Todos los que
hemos subido a un escenario hemos tenido
muchos momentos en los que tan solo querías
que se abriese el suelo y pudieses desaparecer
de la vista del publico.
Por aquellos años, y en el teatro contábamos
con la maravillosa ayuda del "Apuntador" ...
Un personaje imprescindible en la época, que
escondido dentro de la "Concha" libreto en mano
sacaba a los actores de muchos apuros...
Con una representación por mes tan solo
disponías de 4 o 5 ensayos, y si contamos
además, de la falta de un libreto completo por
cada actor, era prácticamente imposible que
nos supiésemos el papel a la perfección...
Jesús, compartió estrenos con un buen
numero de actrices y actores que pusieron
su afición al servicio del publico con el único
propósito de entretener, y divertirse, porque no,
ellos mismos. Los ensayos siempre han sido una
maravillosa fuente de sensaciones repletas de anécdotas.
La década de los 60 estuvo llena de momentos teatrales
muy felices. La ingenuidad de aquel publico no corrompido
todavía por la televisión, que aceptaba con alegría aquello
que les presentaban, unido a la buena predisposición y ganas
de agradar que tenían las actrices y actores genero unas
estupendas veladas de teatro, llenas de humor que satisfacían
tanto a los asistentes como a los interpretes.